La forma convencional de trabajo, ha ido experimentando cambios graduales con el desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). En los últimos años es más frecuente escuchar sobre trabajo a distancia o teletrabajo, el cual consiste en que el empleado realice su trabajo desde un lugar diferente a la oficina. Con la utilización de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, no es necesario que el trabajador se desplace a la oficina, para desarrollar las actividades propias de su cargo.
Las herramientas TIC son fundamentales en el desarrollo del teletrabajo, entre las herramientas que son indispensables para el esta modalidad de trabajo están: la computadora (PC o portátil), fax, teléfono móvil, acceso a internet, etc. Son muchos los aspectos que se deben garantizar para que el teletrabajo sea efectivo y eficiente, una empresa no podría obtener resultados óptimos si no brinda a sus empleados una plataforma moderna que permita el intercambio de información y retroalimentación de los sistemas. La tecnología debe brindar inclusive la posibilidad de coordinar proyectos y la actualización de procesos.
Con el paso del tiempo la sociedad se irá adaptando a esta nueva modalidad de trabajo, los profesionales tendrán más claro cuáles son sus responsabilidad y será más frecuente escuchar de ética y profesionalismo en este ámbito. El proceso de adaptación resultará más sencillo para las nuevas generaciones, que desde edades muy tempranas están en contacto con las nuevas tecnologías. Sin embargo, no solo las personas deberán cambiar su percepción del trabajo y adaptarse al mismo, las instituciones y empresas que deseen implementar el teletrabajo deberán no solo realizar una fuerte inversión en infraestructura tecnológica, sino también deberán proporcionar una excelente capacitación a sus trabajadores, desde los puestos de alta gerencia a los niveles inferiores.
Dentro de este proceso de adaptación el Director de Proyectos tiene un enorme desafío, la forma en que está acostumbrado a liderar proyectos se deberá modificar gradualmente para responder a las necesidades propias del proyecto, sin dejar de lado las necesidades de los trabajadores e involucrados.
Existen ventajas y desventajas del teletrabajo. Entre las ventajas más importantes para el trabajado es que permite una mayor autonomía, flexibilidad, aumento de la productividad, mayor especialización, combinar con otras actividades, integración laboral de personas con discapacidad, entre otros. La empresa también tiene beneficios con el teletrabajo tales como: menos problemas por convivencia entre empleados, mayor productividad debido a la implantación del trabajo por objetivos, menores costos, mayor expansión, crecimiento sin cambios estructurales, etc. Sin embargo, existen ciertas desventajas relacionadas con la falta de ambiente laboral y disminución de relaciones sociales que puede ocasionar problemas intrafamiliares. Para la empresa puede significar pérdida de jerarquías, conflictos derivados de la lealtad de los teletrabajadores cuando accedan a los bancos de datos de la compañía, una menor socialización y participación del trabajador, etc.
Una vez analizadas las ventajas y desventajas de la implementación del teletrabajo el Director de Proyecto deberá establecer un mecanismo para potenciar el rendimiento de los trabajadores y disminuir o minimizar cualquier efecto adverso para el proyecto. Sin embargo, a pesar de las diferencias sustanciales que existen entre el trabajo convencional y el teletrabajo, para ambos tipos de modalidades, es importante que el Director de Proyectos desarrolle las competencias personales, tales como: comunicación, liderazgo, integración, trabajo en equipo, profesionalismos, etc. La motivación es fundamental para mantener un ambiente de trabajo agradable de manera que el trabajador desarrolle un mayor compromiso. Además, el Director de Proyecto deberá desarrollar un mecanismo para evaluar el desempeño de los trabajadores, con el fin de garantizar la calidad y el éxito del proyecto.
Conclusiones y recomendaciones
El teletrabajo ahora es una realidad y cada vez se volverá algo más común, es probable que los niños de hoy no se deban desplazar a un lugar de trabajo u oficina para realizar sus labores, será algo natural para ellos. Sabiendo esto debemos pensar como Directores de Proyectos, como adaptarnos a los cambios.
El Director de Proyectos deberá liderar sus proyectos y ser cada vez más versátil. Sin embargo, el desarrollo de competencias no es exclusivo de una modalidad de trabajo. La comunicación seguirá siendo fundamental para el éxito de un proyecto independiente del medio que utilicemos, por lo que el DP debe fomentar la comunicación asertiva. El trabajo en equipo es fundamental, aunque físicamente los miembros de un equipo no estén en un mismo lugar, se debe desarrollar el espíritu del trabajo en equipo ya que todos forman parte de un mismo proyecto. Además, la motivación es un aspecto muy importante para potencializar el desempeño de los trabajos.
El Director de Proyectos deberá velar por el cumplimiento del Código de Ética y establecer una escala de valores, que permitan que todos los miembros del proyecto se conduzcan adecuadamente en el mismo. Se deberá evaluar cuales personas son aptas para este tipo de trabajo y que funciones se pueden realizar lejos de la oficina.